Un duro informe de la Auditoría General de la Ciudad (AGCBA) puso en evidencia el atraso en las estadísticas de salud pública en CABA. Los registros de salud mental, obstetricia y odontología no se actualizan desde 2015, mientras que las cifras de consultas externas y egresos hospitalarios tienen su última actualización en 2022.
La auditoría sobre la gestión 2024 de la Gerencia de Estadísticas en Salud cuestiona que la información, necesaria para planificar políticas sanitarias, no está disponible ni se publica de forma oportuna, lo que impide diseñar estrategias basadas en evidencia.
El informe detalla que:
No hay datos recientes sobre admisiones de salud mental desagregadas por edad y sexo.
Tampoco se actualizan los partos por tipo ni las prestaciones odontológicas según hospital.
El promedio de camas por especialidad no se revisa desde 2017, lo que complica dimensionar la capacidad real de atención.
La información de “Movimiento Hospitalario” de 2023-2024 aún está “en procesamiento”, con un cambio de metodología que recién se normalizaría en 2025. Para la AGCBA, el problema es estructural, ya que no existen “procedimientos ni circuitos administrativos con controles formalmente implementados”.
Pese a que algunas observaciones ya habían sido marcadas en una auditoría de 2019, el organismo remarcó que el atraso persiste y que las decisiones sanitarias en CABA se toman sin datos confiables ni actualizados.