Joaquín de la Torre, ya sea por su alianza estratégica con Patricia Bullrich, o por la intermediación Javier Milei- Mauricio Macri, de la Torre, se mantiene firme en su derrotero de convertirse en gobernador de la provincia de Buenos Aires.
El senador, recientemente renunciando como vicepresidente de la Cámara Alta bonaerense, demostró sus diferencias con sus aliados de Cambiemos, al quedar sin efecto por un lapso de tiempo más, la reelección de los intendentes, más allá de dos periodos consecutivos.
Efectos del alineamiento de Joaquin De La Torre con Bullrich. Ayer en San Miguel, el Larretismo, se mostró junto con @MaxPerkinsOk en lanzamiento de Instituto República. En la foto referentes de Malvinas, Moreno y José C.Paz y @aforchieri , clave en armado de @diegosantilli pic.twitter.com/WxlBVmMye1
— Sebastian Dumont (@tomy2430) October 19, 2022
BULRRICH EN MORENO, HACIENDO CAMPAÑA JUNTO A JOAQUIN DE LA TORRE, CON PRETENCIONES A GOBERNADOR
— Cristina (@florapastalinda) September 21, 2022
Caminaron por el caso céntrico. Hablaron con comerciantes, escucharon reclamos y recibieron esos aplausos que están siempre en el sitio adecuado y lugar correcto.ñ pic.twitter.com/N3oUHkWkEL
Es que la ley entró en vigencia en un periodo de elección de medio término, lo que provocó la no reelección de concejales y consejeros escolares, pero no trabo la de Intendentes.
Lo cierto es que de la Torre viene tejiendo la telaraña provincial, desde el momento en que se constituyó como ministro de Gobierno de María Eugenia Vidal y no se detuvo nunca más.
Mantiene estrecha relación con Intendentes de ciudades como Azul y San Pedro, con tropa propia de concejales en varios distritos, como es el caso de Mar del Plata, además de su terruño, San Miguel, en donde derivó el control de la alcaidía a un ahijado político (Jaime Méndez).
También apuntó los barcos desde 2017, al municipio fronterizo de Moreno, (400.000 electores), situación que lo llevó a un estadio de alianza con los hermanos Asseff, deteriorándose luego del proceso electoral de 2019 y fracturándose definitivamente en 2021, en donde confluyeron en la lista de Facundo Manes.
Aquí en Moreno, es donde mandó a caminar a su hermano, el pediatra Pablo de la Torre y financia a dos concejales de la línea Juntos, que están sentados en una banca: Gisele Agostinelli y Julián Cigna; las dos espadas que, junto al rotondista Demian Naya, es con las que busca asestar una derrota definitiva al armado Santillista conformado por el dueto Aníbal Asseff/ Leonardo Copolla; responsables de los eternos fracasos de la oposición local.
Además, el ex rugbier de regatas, es el máximo representante del Opus Dei en su zona de influencia y muy cercano a la Diócesis de San Miguel, sus estudios secundarios fueron ejercidos en el Colegio Don Jaime y su título de abogado fue otorgado por la Universidad Católica Argentina.
Si nos detenemos en su imagen pública, los contrastes son llamativos, a su prolijidad para moverse como pez en el agua turbia de la política, se le opone su impronta de hombre parsimonioso para hablar y su vulgaridad para vestirse. Sus detractores lo pintan como un tipo duro para la negociación y extremadamente ambicioso.
Los rumores más bajos lo conectan con los Registros de Automotores de la zona, su “caja” de financiación política, situación que lo colocó en una postura incómoda, cuando la ex gobernadora María Eugenia Vidal, amago eliminarlos, la misma postura sostenida actualmente por Patricia Vázquez (la colaboradora más estrecha de Patricia Bullrich).